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CONVENIO DM ENERGY
Con el fin de daros mayores ventajas y ahorro en vuestros gastos fijos, desde AICO hemos firmado un ...
CONVENIO CHANCE & CHOICES
Dentro de las acciones y aportaciones técnicas para grandes proyectos y eventos que AICO aporta a los...
CONVENIO BANCO SANTANDER
Con motivo de los nuevos productos lanzados para las pymes y autónomos por el Banco Santander, se ha materializado un convenio de...
CONVENIO SGR-AICO
Siguiendo la línea de trabajo marcada desde la Junta Directiva para ofreceros herramientas financieras para...
ACTUALIZADO EL CONVENIO B.SABADELL
Con motivo de la nueva incorporación de D. Carlos Vilchez en la Dirección Regional Marina Baixa del Banco Sabadell, se ha...

 

 

Solemos escuchar estas frases tópicas sobre la profesión de comerciante: *"poner un comercio es fácil, no hace falta estudiar una carrera...", "tu habla mucho y ya está, seguro que vendes mucho y convences a la gente...", "lo único que hace falta para poner una tienda es traer género y echarle morro", o, "para estar en una tienda y darle a la gente lo que pida tampoco hace falta ser un crak, eso lo hace cualquiera"*, y por desgracia, estas frases y en un porcentaje importante, son ciertos.
Te invitamos a reflexionar con tan solo estas 10 situaciones que te indicamos en la siguiente tabla, y saca tu propia conclusión.
En caso de que te identifiques como TENDERO o como COMERCIANTE, desde Aico estamos dispuestos a apoyarte y seguir mejorando contigo para que tu futuro y el del comercio de Benidorm sean una verdadera experiencia de compras.
**Idea elaborada sobre los textos del curso realizado e impartido por D. Luis Munera Martínez (Despierta Comercio).

Abres la persiana de tu negocio y ...
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Tu higiene personal y presencia visual atrae mucho más a las moscas.
Tu higiene personal y presencia visual esta cuidada y agradable en general, adaptada a la imagen comercial y/o perfil potencial de tus clientes/as.
Solo sonries cuando ves una película de Charlot, por que los clientes/as no se fijan en eso.
Recibes a tus clientes/as con una sonrisa y unas palabras de bienvenida. Los tratas como a tí te gustaría ser atendido/a.
Esperas a que el polvo de los estantes se vaya cuando entre el aire.
Coges la fregona y el trapo, y empiezas a limpiar la acera y el interior del local.
Te pones a ver videos con el móvil.
Coges el móvil y actualizas los textos y fotos de tus redes sociales.
Esperas la visita de tus proveedores/as para hacer tus pedidos.
Acudes a ferias profesionales y contactas por internet con nuevos proveedores/as conociendo nuevos productos y tendencias.
Tu escaparate lleva semanas sin cambiarse, no has quitado la decoración de Navidad en pleno agosto.
Tu escaparate como mínimo está diferente cada semana.
No te importa nada lo que opinen de tí los clientes/as, solo te preocupa el dinero que ha entrado en la caja registradora al final del día.
Te importa lo que piensan de tu negocio los clientes/as y les preguntas directamente al finalizar cada venta, o les invitas a rellenar un breve cuestionario de opinión cada cierto tiempo.
Estas aburrido/a de hacer cosas y nada funciona. Esperas a la edad de jubiliación para alquilar el local o traspasar el negocio.
Sigues teniendo ilusión e iniciativa para hacer nuevas cosas aunque los resultados no sean los esperados. Te reciclas, actualizas y asistes a cursos formativos aplicando en tu negocio lo aprendido.
Te centras en lo que pasa dentro de tu negocio, no te importa la problemática de tu barrio, vecinos/as, ciudad y sector.
Te implicas en los problemas de tu barrio, participas en campañas y actividades con otros comerciantes y reinvindicas las causas que te afectan.
No te importa que tus percheros estén oxidados y rotos, o que el mobiliario comercial sea del siglo pasado, los clientes no lo notan.
Actualizas el mobiliario y las instalaciones a medida del uso que van teniendo, para mantener la imagen del establecimiento cuidado y acogedor.